HAITI 2004-06
Cuarenta grados de calor, y el miedo de no saber si a la vuelta de la esquina se encontrarán rebeldes armados, ex militares desconfiados, chimeres (fantasmas en creole), partidarios del depuesto Presidente Aristide–; una manifestación álgida contra o a favor de lo que fuere, una ceremonia vudú. Son las sensaciones inevitables para el extranjero en Haití,.Hace doscientos años Haití fue la primera nación negra en independizarse del mundo: echaron a los franceses tras catorce años de lucha. La muerte aquí está más cerca.
desde el Diario:
Nos embarcamos en el Antonov arrendado por N.U a las 4 de la madrugada; conmigo viajan los dos pilotos y los dos mecanicos de los tres helicopteros Pumas chilenos, que todos desmontados reposan en el vientre del inmenso avion de carga.
El avion pertenece a una sociedad inglesa pero es ruso, su tripulacion se compone de unos 12 hombres, rusos tambien; nadie nos pesca mientras cruzamos la tremenda guata del avion, llena de piezas de los helicopteros, jeeps, una pequeña grua, ademas de miles de botellas de agua mineral; llegamos a una salita debajo de la cola. No hay ventanillas y los cinturones de los destartalados asientos estan todos rotos, los 4 chilenos bromean, se acaban de despedir de sus familias en el terminal del aereopuerto, volveran en 6 meses ,mas si todo va bien. El primer piloto del helicoptero me cuenta que esta es la segunda vez que viaja en un Antonov para cumplir con una mision de paz, hace unos años estuvo en Timor Est,
“¿Cual sera´su mision en Haiti?” pregunto, “Patrullaje mas que nada, realizar conexiones entre la Capital P.P y Cap Haitien a unos 40 minutos al Norte de la isla en donde estan nuestras tropas”.
En pudahuel haran unos 2 grados sobre cero, mientras notamos los rusos del Antonov en manga de polera afirmando la carga.
“Estos tipos no tienen casa, este avion es su casa” me cuenta el mecanico chileno, mas adelante se ven las camillas, una pequeña cocina y un baño.
“Ellos recorren el mundo transportando lo que se le pida”
Despues de 7 horas aterrizamos en el Aeropuerto de Puerto Principe, son las 12 de la mañana el calor es infernal, hay una tropa chilena siteada en el aeropuerto, que empiezan a descargar, hay apreton de manos y abrazos mientras los helicopteros empiezan a descender.
Mi vuelo hacia Cap Haitien es en tres dias mas, no me puedo alojar con las tropas en el aeropuerto y por el momento me quedare´en Puerto Principe.
“Aqui te la arreglas vos, esto es Haiti” me dice un capitan que en un jeep de las NU me tira afuera del aeropuerto, en un matorral donde una decena de taxistas se me vienen encima.
“Viva Argentina” me despido intentando esconder mi miedo, “Yo soy uruguayo, suerte che”
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