Pubs:
texto: Lorenzo Moscia
Los Pubs en Irlanda son como las iglesias en Roma: lugares de culto.
La historia pasa, fluye por estos lugares que son en algunos casos como verdaderas maquinas del tiempo; sus raíces remontan a fechas que oscilan entre los trescientos y los doscientos años de antigüedad sin notarse muchos cambios en sus interiores.
Con temperaturas que varían entre -4 y +1 grados, refugiarse en unos de estos santuarios de la cerveza representa un momento de paz único. El viaje en el tiempo empieza al cruzar una pequeña puerta de madera que cruje, dejando atrás el viento para sumergirse en una atmosfera hecha de charlas amigables, y miradas acogedoras. Obligatorio tomarse una Guinnes.
Paul James, (53) me explica que para servir una pinta de Guinness se necesitan aproximadamente 2 minutos y medio. “Primero se rellena el vaso inclinándolo a 45 grados hasta tres cuartos. Después se deja descansar hasta que la densa espuma se haya ido hacia arriba, operación que toma unos 3 minutos, solo ahora se define la obra de arte acabando lentamente de rellenar el vaso.
Paul James es cantinero del Kelly ´s Cellar en pié desde 1720 y a primera vista sin muchos cambios por lo menos el los últimos 100 años: Estamos en el pub mas antiguo de Belfast. “Aquí afuera a unos 5 metros estaba el rio Farset, que ahora corre bajo la tierra, los antiguos marineros los ocupaban para llegar desde el puerto a la ciudad. “ mientras Paul me cuenta no me cuesta mucho imaginarme hordas de marinos de hace dos siglos que después de meses de alta mar llegan a rellenar el Kelly s. El lugar, es un museo con sartenes colgando desde los bajos techos, con sus mesas de maderas y dos chimeneas se mantuvo casi intacto. De echo hay una foto en la pared que retrae a los Belfast Gypsies, un grupo de rock popular en los años 60, tomándose una pintas en el Kellys. En la foto , tomada el el 1965, el lugar se aprecia igual.
La única cosa que ha cambiado son los brazos para servir cerveza.
No muy lejos se encuentra el Maddens, del 1745, donde la política y sobre todo los años de los “troubles” se respiran mas profundamente que en el Kelly´s. Hay fotos de Bobby Sands en las paredes, cursos de gaélico,
Durante el día se escuchan las campanas de la cercana Iglesia de St.Mary , y por las noches el lugar está repleto de jóvenes artistas que tocan música antigua con violines.
Cerca de la estación de buses de Belfast se encuentra el The Crown, una especie de Titanic al lado del Kelly s y Maddens sea por el estilo que por las dimensiones.
En el Crown todavía se encuentran perfectamente conservadas diez cabinas de la edad Victoriana, para poder alojar los clientes mas reservados. Fundado en el 1885,
A dos horas de bus hacia el Sur se encuentra la Meca de los pubs Irlandeses: Dublin. Aquí la cantidades de pubs históricos es impresionante. En los alrededores del Trinity college se encuentra el Pub O´Neills, donde Linda McCulling y Patricia Harbot de 83 y 82 años se dan cita desde hace 43 años todos los martes y jueves por la tarde, para tomarse unas medias pintas de Guinness. “No le conviene tomarse una pinta entera?” pregunto inocentemente. “Somos muy lentas para tomar, se nos calentaría mucho y así sentimos que tomamos menos…”me contesta Patricia.
Aquí hay barrio que se llama Temple Bar, cerca del rio y donde está una gran concentración de pubs, el Temple bar pub es quizás su representante mas característico. Lo que me llama la atención llegando de Belfast, son las dimensiones de algunos pubs como el O Neills que se desarrolla en tres pisos, o el Café en Seine, con mas de 280 asientos, 4 pisos. Pero también se encuentra el pub mas chico de Irlanda el Dowson, 15 asientos, a 10 metros bajo tierra, sin ventanas, características principales a parte de su tamaño es el baño, donde hay que ir con paragua en los días de lluvia porque el paso peatonal que constituye el techo está lleno de hoyos.
Aquí hay tomarse un Whiskey Bushmills si o si.
Después de unos días en Dublin se echa de menos la sencillez de los pubs de Belfast, y a mi regreso en el Kelly´s Cellars mi pub preferido, encuentro un grupo rock formado por 4 sobrevivientes de la escena punk de finales de los 70 en Belfast. Bajo, Batería, Guitarra y voz con 60 años cada uno, alimentan la fría noche en el Kellys, tocando baladas de rock a todo volumen. Ahora quien entra en el Kelly es realmente trasportado en otra época. Con los codos apoyados entre dos mesas disfruto el lugar repleto de gente no tan joven, que baila con una energía envidiable.
Cuando se habla de Belfast, cuesta demasiado no poder hablar de los años denominados “troubles” de los conflictos entres católicos y protestantes, nacionalistas y lealistas. Cabe mencionar entonces dos pubs que ya no existen.
El Mc Gurk, lugar de encuentro de la comunidad católica que en diciembre del 71 fue destruido por una bomba puesta por un grupo de protestantes lealistas y que mató a 15 personas. Y el Bayardo, donde en el 1975 murieron 5 personas, lugar de encuentro de la comunidad protestante.
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